sábado, 21 de julio de 2007

* El Sábado que quería ser Jueves



Sabado 21 de Julio de 2007, murio Jesús del Gran Poder, el adalid de la libertad de prensa !que triste! Primero mis condolencias por que ha muerto una persona y siempre que muere una persona me apeno. Pero las cosas claras este presidente de un lobby que reduce la izquierda a un mero "ser" insipido llamado PSOE, que cabalga a manos de sus emisoras y receptáculos informativos, no es el "ser" al que más le debe la libertad de prensa, digamos que es realmente al revés. Ya que con su cuasimonopolio audiovisual niega a otra gran cantidad de personas deseosas de dar buena información la capacidad de hacerlo.
No todo es negativo ,en su figura, de hecho entre la mala calidad de la prensa española en general, digamos que sus medios sobresalen.
Pero este gran hombre se metió con sus grandes amiguitos latinoamericanos en lugares donde no debía. Como en el caso de Venezuela donde medios de su grupo se dierón "prisa" en apollar el golpe de estado. Madre de Dios y luego nos llevamos las manos a la cabeza porque no se le renueve la licencia a otro medio audiovisual.

Vaya chasco que no fuera el Jueves el día de esta trágica noticia así hubiera coincidido con el nombre de la revista de humor gráfico donde se a producido un ataque a los derechos de dos señoritos que viven penurias tremendas en sus puestos de principe y princesa de la realeza española. Si fuese asi coinicidiría en algo con un verdadero ataque a la libertad de expresión, que sí que puede ofender a la gente de recta moral y monarquica de convicción, pero mayor ataque es el mero existir de estos puestos y no va la policia a deternerlos.
A todo esto mis mejores deseos para el hijito del fallecido que le vaya bonito al frente de su macroimperio y deje de entrometerse en los asuntos internacionales como si fuera el dueño del mundo.
Enrique Lopéz Castellón citando a Nietzsche en el prologo de un libro de éste dice que Dios ha muerto, no creo que Jesús del Gran Poder tenga tantas habilidades como Dios pero éste mortal ha dejado "cuatro"huellas en el corazón de nuestra sociedad que ha pasado de oler a naftalina a oler a "chanel número cuatro". El gran problema es que no se cual huele mejor, el jueves lo decidiré.

Adrián Ruiz Ibáñez 2007
PD:Las imagenes son vínculos de la publicación digital ADN

7 comentarios:

Anónimo dijo...

En cuanto al "Gran Hermano": lo siento, pero a mí no me da ninguna pena. Comoquiera que juzgar la "bondad o maldad" de los seres humanos pasa por juicios de valor subjetivos y subordinados a su vez a nuestros propios patrones (católicos radicales, no cristianos porque si fuera así otro gallo nos cantaría), sencillamente podemos enumerar algunos de las "loas" a la libertad de expresión por parte de este "sujeto": mientras el diario16 destapaba en su día casos de corrupción y terrorismo de Estado (con el Gal), El País se preocupaba de proteger a un embustero y un auténtico "enemigo de clase" (para quien quiera datos del deterioro de las condiciones de los trabajadores en la primera época del PSOE, ver "La modernización política de España", de A. Elorza): Felipe González. Eso sí, aplastando toda la crítica interna o externa que pudiera dinamitar un imperio construido bajo el amparo del PSOE; de ahí las visiones de "demócrata", "liberal", etc., de que disfrutaba. Ni demócrata ni liberal. "No fui yo el inventor del capitalismo (...), conozco cómo funciona" (J. Polanco). Efectivamente, conocía el funcionamiento a la perfección y más de lo que Benedict Anderson llamaría el "capitalismo de imprenta": al fundirse su fórmula de "aparato ideológico" con el aparato represor de un PSOE en línea dura, toda crítica (como en la actualidad: ¿por qué alguien que quería limitar el poder mediático, como López Aguilar, es "desterrado" como en el franquismo a Canarias?) era impensable, siempre engrandeciendo tamaño imperio. Eso sí, ahora es Jesusito "de mi vida"; no estamos para historias, y menos con un personaje así. Por otro lado, el asunto del jueves está claro: la actuación FASCISTA (que quede claro porque si no luego pasa lo que pasa) de la Fiscalía General y del juez en cuestión (y de la Casa Real?) contra la libertad de expresión no ha sido cuestionada (de forma masiva) porque arrastramos (como sociedad, si es que existen esas "totalidades analíticas" en bloque llamadas "sociedades") graves carencias democráticas: la libertad de expresión es o no es. Sólo cuando entra en conflicto con el derecho a la privacidad es cuestionable, pero da la casualidad de que ambos personajes son sujetos públicos; si "El Jueves" estuviera lastrado por alguna intervención judicial en ese sentido, la jurisprudencia podría (en algún caso) hacernos dudar; pero, dado que se trata de una intervención arbitraria (y contraria al Estado de derecho liberal), sólo puede nombrarse como lo que es: FASCISMO REGIO

Bloggmaker dijo...

Libertad de expresión no puede ser nunca escribir lo que a cualquiera se le pase por la cabeza.
No caigamos en el cinismo de alabar a quienes se rebelan contra la monarquía porque con la misma argumentación los hay que alzan la mano y rememoran cruces gamadas y cruzadas de cartón piedra.
La libertad de expresión exige de toda sociedad democrática un diálogo explícito y abierto, en el que podamos expresar lo que pensamos sin miedo a que nadie nos lleve al paredón por ello.
Pero siempre puede aparecer la ceguera crónica, y parecemos olvidar que no sólo es de fascistas eso de cargarse o callar la boca a quienes piensan de forma diferente. Fusilados los ha habido de todos los colores: rojos, azules…
El jueves no es más que caricatura en papel, que divierte a la gente que la compra. Pero hay veces en las que el lápiz parece no poder ironizar sobre todo. Eso queda claro en su propia línea editorial, en la que demuestran todo su valor ironizando con la muerte de un Papa como cagándose gráficamente a la hora de hacerlo con Mahoma.
¿Responde a un fascismo regio su censura? Yo no lo calificaría como fascismo, chirría demasiado como para ser cierto. No podemos alabar la Constitución como el éxito de las élites a la hora de enterrar 40 años de nacionalcatolicismo y al Estado de Derecho que el mismo Carrillo consensuó, y cuando resulta que nos llaman la atención con un "eso caca" quejarnos y balbucear un rechiste en plan "eso es fascismo". Si fuese fascismo la censura habría hecho desaparecer a quienes lo escribieron, y no sin antes haberles "interrogado". De haber sido fascismo los sonrientes guionistas habrían meado sangre. Eso caracterizaba al fascismo. Lo que tenemos ahora es un berrinche en el que queremos poder cagarnos en todo y encima hacerlo a la cara o encima de quien se nos pase por la cabeza poniendo por delante un "libertad de expresión: jódase en silencio".
Lo que sí deja claro es sobre qué estamos dispuestos a reírnos e insultar y sobre qué no se puede.
El Jueves no es más que un BuFfón de papel, a quien el Rey le ha dicho que se puede hacer humor con toda la corte menos con su Corona.

Petrovich dijo...

"El fascismo es un régimen de excepción permanente" (N. Poulantzas). No vamos a entrar en la definición de fascismo porque podríamos estar toda la noche, y aún así no llegar a un mínimo acuerdo.
1-Fascismo es la violación de la propia legalidad vigente: ¿cuáles son los valores fundamentales de la Constitución? (por cierto, en la cual no existió poder constituyente así que nos podemos olvidar de fundamento "democrático"). La libertad, la igualdad, la justicia y el pluralismo político: es decir, orientan y DIRIGEN todo el ordenamiento legal y constitucional. Bueno, en virtud de su cumplimiento y acorde al "pluralismo político", se ilegalizan partidos con "sospechas de conexión a ETA". El derecho pasa de ser positivo a sancionar los pensamientos (democrático totalmente) en lugar de los hechos. Y no sirve lo de "salvo en caso de banda armada..." porque: primero, son necesarias las pruebas y, segundo, en caso de conflicto, la seguridad es un criterio que "palma" ante los otros cuatro valores superiores.
2-El fascismo se distingue por tribunales políticos: bien, vilando toda unidad jurisdiccional, existe una herencia del TOP, la Audiencia Nacional...ah, es verdad, que también se juzgan delitos de narcotráfico, sí, sí...cuatro. Tan es así, que los presos "políticos" que allí se juzgan son incluso los de Jarrai...
3-Una concesión progresiva de potestades al (lo que desde el estructuralismo marxista se llamaría) aparato represor del Estado: en el plano nacional, Fuerzas Armadas y Cuerpos de seguridad intervienen de forma cada vez más arbitraria (ya ya, es por seguridad...o dominación, quién sabe) y, por si no lo sabíamos, en las Comunidades Autónomas y algunos municipios se les dota de "extras" (por ejemplo, las últimas normativas municipales de Madrid son escalofriantes, contemplando por ejemplo incluso el arresto de 72 horas por LEGÏTIMA DEFENSA ante una acción no flagrante de la "madera", y hay más cositas...).
4-Una conexión entre los aparatos burocráticos, represivos e ideológicos de forma corporativa, posibilitada por el respaldo del capital; cuando en Madrid se han comenzado (incipientemente) a relanzar proyectos de organización autónoma, diversas Cajas de Ahorros aparecen como financieras de futuros partidos de extrema derecha...qué raro (y el Opus llenando los centros de contraideología).
5-Una ideología expresa: ¿cabe algún nacionalismo "moderno" en este Estado? (que no sea ESPAÑA ESPAÑA ESPAÑA, ra ra ra)Creo que, a excepción del "Dios (que todavía dura), patria y el Rey", las naciones modernas que han dado la cara han salido escaldadas...(por no hablar de las concesiones constitucionales a las Fuerzas Armadas o a la IC, etc.).

Así podría seguir, pero no terminaríamos. Tan sólo leyendo atentamente algunos artículos de la Constitución podemos ver un ordenamiento "bastardeado", quizás útil para evitar una guerra (quizás porque chirría un poco que insistan tanto), pero "sólo" (y nada menos) eso. Más allá del pacto, quedan poderes arbitrarios de los que el pueblo o el poder democrático, o no es directamente responsable (como en este caso, por eso lo de "fascismo regio") o tampoco ha sido su "instituyente" (podríamos preguntarle a Euskadi qué opinaron en su día, sin representante alguno, de la constitución). Ah, otra norma básica del liberal-constitucionalismo es la previsión legal, no la intervención arbitraria de órganos "ad hoc", porque esto es propio de regímenes antidemocráticos como el nuestro: fascismo (por la vertiente antidemocrática) regio (porque la cosa, en este caso era la Corona, y porque también, desde un punto de vista democrático y constitucional, no hay nada más contradictorio que "...es una monarquía parlamentaria". Lo malo es que nos lo creemos). De ahí mi denominación del "sistema político", porque creo que está más próximo que de una "democracia representativa" (qué lamentable, ni siquiera unos principios democrático-representativos se sostienen).

Bloggmaker dijo...

Lo de que no íbamos a llegar a acuerdo no es motivo para no hablar, de lo contrario sería muy difícil conocer la diversidad de pensamiento que nos rodea. Se exponen diferentes puntos de vista para que el otro sepa, simplemente, lo que uno puede llegar a entender sobre cualquier materia, Fascismo en este caso. De todas formas, viniendo la definición del estructuralismo marxista de Poulantzas, deja claro sólo uno de los puntos de vista.

Si se acepta que lo propio del liberal-constitucionalismo suele ser la previsión legal, creo que está perfectamente previsto que a aquellos que toquen los cojones les caerá un puro. Síntesis del Derecho.

Mira tú por donde, al final va a ser un problema de definición esto de vivir en sociedad y ponerse de acuerdo en el debate político. A las elites de poder que formaron parte de la Transición parece que les quedó bastante claro eso de pluralismo político, aunque no le incluyeran en el DRAE de bolsillo del Parlamento. Por un lado no parecía muy plural eso de tener un partido único y un sindicato vertical, y por otro tampoco lo parece que haya grupos que se dediquen a destrozar la calle y quemar buses a base de pataleta nacionalista (más pataleta, que nacionalista), y tampoco matar a un hombre por esperar a su hermana en el aparcamiento de la T4 el día que se le ocurre a alguien reivindicar la “libertad” para Euskal Herria. Pero claro, como el Estado tiene todo un aparato represor de hombres con casco y bolas de goma que dan a diestro y siniestro... Eso va a ser.
Lo grave es que planteadas así las cosas se les da la razón, pues cuando la violencia se combate con violencia la razón es de quien gana el combate. Si sancionar pensamientos es decirle a un grupo de personas que no se puede incendiar containers, destrozar cabinas ni poner coches bomba, me temo que se sanciona algo. Si se le pega un tiro en la nuca a una persona por tener un cargo para el que ha sido elegido en las urnas por vascos (tal vez con RH adulterado) en un Ayuntamiento, se sanciona matando. Diferencia que no hay que obviar.

Sobre la conexión entre los aparatos burocráticos, represivos e ideológicos de forma corporativa, posibilitada por las Cajas de Ahorro no me acaba de quedar claro si la naturaleza del Capital varía cuando los fondos se consiguen gracias al “impuesto revolucionario”. Tal vez gracias a éste la naturaleza explotadora y opresiva del liberal-constitucinalismo se democratiza.

Respecto a la responsabilidad democrática y la legitimidad del orden establecido, a todo el que no esté de acuerdo se le ofrecen diversas formas de hacerse responsable y manifestar su desacuerdo. Lo de visitar las urnas no parece una de las medidas más aclamadas, pero es la que determina lo legítimo y la que desprecian los que usan la violencia, que ven en el sistema sólo una burocracia opresora que no les deja más remedio que irse a Francia a pillarse un par de furgos cargadas de explosivos democráticos. Si no fuese faltar el respeto a los muertos, diría que sus propuestas electorales son la bomba, pero de las que asesinan. Y eso de las elecciones ya ha habido alguna que otra desde que se firmó la “elitista y antidemocrática Constitución” y su naturaleza bastardeada no parece provocar clamor popular en quienes la soportamos, salvo cuando nos suben los impuestos o cosas tan vitales como esa. Esa bastarda logró evitar la repetición de otro fratricidio poniendo de acuerdo a las elites de la izquierda y la derecha oficiales. Evitar una guerra supuso ya un punto de inflexión en la Historia de nuestro país, sobre todo teniendo en cuenta los 40 años que se había vivido.

Anónimo dijo...

Con lo del "no ponerse de acuerdo" no me refería a no hablar ni a admitir las diferencias. Sólo quería dejar clara mi postura respecto a la "tontería" de un debate semántico (aunque en el lenguaje está el poder, también lo sabemos). En lo de la guerra es lo último que he dicho, que "sólo" (y nada menos) había evitado una guerra, no que en el contexto histórico no fuera buena. No termino de ver la conexión defensa de la democracia-ETA, creo que en ningún momento he defenido el terrorismo esencialista y bastardo. Tampoco he llamado "bastarda" a esta tan santa constitución, digo que se bastardeó su naturaleza, la del poder constituyente, violado salvo en el principio de "excepcional o extraordinario". Los principios constitucionales a los que aludo son sencillamente eso, principios y valores "superiores" del ordenamiento constitucional, no dogmas religiosos fundamentales. Sí, las elecciones están ahí, pero es un pelín difícil cambiar la Constitución ahí, más que nada porque como se cuidaron bien de blindarla, y visto lo visto respecto a los "acuerdos" de los representantes, parece que tendremos constitución hasta que una guerra se la cargue (un destino majete para las constituciones blindadas). Tampoco estoy de acuerdo en lo del fratricidio, pero eso debe ser porque a mí las guerras me parecen todas igual de asquerosas, y paso por alto lo de las familias, literalmente (y no vale lo de "hermano contra hermano" porque da la casualidad de que a una parte de mi "familia" le tocó eso). Es sencillamente repulsivo que la libertad de expresión sea corporativizada por una institución ANTIDEMOCRATICA, por naturaleza, vamos. Y ese era todo mi fin, no ensalzar a ETA o al terrorismo (por cierto, identificar a todo Euskadi, NO representados en la CE1978, con el terrorismo etarra me parece un poco ¿raro?). De lo del nacionalismo, también tengo mis dudas. No creo que sean pataletas, me parece que hay una conciencia nacionalista profunda, otra cosa es que ese nacionalismo sea, muchas veces, esencialista y "ponecazos", en lugar de coherente y de autodeterminación (o autonomía) política. Tampoco me hace gracia. Existen contradicciones normativas a lo largo de toda esta "carta magna", pero lo más grave, y era a lo que iba, son los fundamentos y muchas dinámicas antidemocráticas. Pero si una crítica a la Constitución la equiparamos a la defensa del terrorismo...elecciones ha habido unas cuantas, sí. Y hay problemas muchísimo más graves, por supuesto, bastante más importantes que los debates aquí suscitados. Pero al centrarnos en un tema, definimos una cuestión como problema y lo situamos como eje de la deliberación, ¿no? Lo de Poulantzas era "una definición", no LA DEFINICIÓN. Relativizar eso es como si todos nos dedicáramos a sacar punta a cualquier frase que aquí se menta relativa a algún científico, teórico, pensador, etc. Admito la diferencia, por supuesto. Lo que no entiendo tanto es el "mosqueo" o ese "sacapuntas" a todo, hasta lo que no se dice. En fin, con la Iglesia (o la Constitución) hemos topado. Un abrazo.

Bloggmaker dijo...

Me alegra que se acepte la diferencia, aunque reconozco que el eje de la discusión se difumina o, si se quiere, se multipolariza.

Obvio parece que entre la tontería y el concederle mayor importancia a ver de qué hablamos, me suelo interesar más por la definición de conceptos. Más que como placer sibarita, para intentar comprender a quien opina. Desde que me hablaron de la polisemia me invade la curiosidad (no mosqueo) cada vez que oigo a personas hablar sobre libertad, ciencia, sociología… pues muchas veces por una misma palabra se entienden cosas diferentes o incluso antagónicas. La conexión ETA-democracia nunca se dio (no, la crítica a la Constitución no convierte a nadie en terrorista), simplemente intenté complementar la aportación que se hacía pero dejando al mismo nivel antidemocrático a quienes usan la violencia para imponerse (hasta que no inventen el terrorismo pacifista, aquí incluyo a cualquier terrorismo) y a la Banca con un poco de retórica. Otro tanto de lo mismo con la guerra y por la misma razón. Cuando hablo de fratricidio no pretendo darle un grado mayor que a cualquier enfrentamiento armado, sino poner en claro lo que eso supone para el hombre.

Punto y aparte parece merecer todo lo que a la Constitución se dice. No por su santidad precisamente, sino por todo lo que hemos escrito de ella en un par de comentarios. Aunque no llego a entender el por qué de la metáfora religiosa, evidente parece que esos principios pueden llegar a todo menos a dogmas, pues en política todo depende de quien mande, y eso asienta unos valores inamovibles que no se encuentran escritos en el panfleto del 78, sino que poseen carácter implícito.

¿Cómo combatir entonces la carencia de democracia en nuestras instituciones? ¿Cómo luchar por la libertad de expresión? La segunda pregunta puede ser en parte respondida con espacios como este, más difícil parece lo primero. Habrá que estrujarse algo las neuronas.

No tengo ni complejo de sacapuntas, ni me suelo mosquear por los comentarios que se hacen en bloggs o foros. En fin, con el diálogo (sobre la Constitución, el fascismo…), hemos topado.

Anónimo dijo...

Pues mira, uno de los defectos democráticos es que la constitución suele (debe) ser la expresión normativa de ciertos valores culturales compartidos; pero aquí es a la inversa, o no se comprendería, por ejemplo, que la igualdad entre hombres y mujeres exista en el plano jurídico y sea, por suerte cada vez menos, una ficción en el cultural. Lo del aspecto religioso se refiere a la incapacidad de crítica, a la asunción de preceptos por encima de todo: la Constitución como un texto sagrado, como los salmos. Por último, democracia no es igual a paz; es un punto crítico que conviene tenerse en cuenta.
Hasta luego